Quizás no hay tal persona que lo haría en sulife no encontró dispositivos, cuyo diseño incluye un tubo de rayos catódicos (o CRT). Ahora, tales soluciones están siendo reemplazadas activamente por sus contrapartes más modernas basadas en pantallas de cristal líquido (LCD). Sin embargo, hay varias áreas en las que el tubo de rayos catódicos sigue siendo indispensable. Por ejemplo, los LCD no pueden usarse en osciloscopios de alta precisión. Sin embargo, una cosa está clara: el progreso de los dispositivos de visualización de información finalmente conducirá a un rechazo completo de los CRT. Esto es cuestión de tiempo.
Un tubo de rayos catódicos: una historia
El descubridor puede considerarse Yu.Plücker, quien en 1859, al estudiar el comportamiento de los metales bajo diversas influencias externas, descubrió el fenómeno de la radiación (emisión) de partículas elementales: electrones. Los haces de partículas formados se llaman rayos catódicos. También llamó la atención sobre la aparición de un resplandor visible de ciertas sustancias (fósforo) cuando los rayos de electrones los golpean. Un tubo de rayos catódicos moderno es capaz de crear una imagen precisamente gracias a estos dos descubrimientos.
Después de 20 años, se estableció experimentalmente queLa dirección del movimiento de los electrones emitidos puede controlarse mediante la acción de un campo magnético externo. Esto se explica fácilmente si recordamos que los portadores de carga negativa en movimiento se caracterizan por campos magnéticos y eléctricos.
En 1895, K. F.Brown finalizó el sistema de control en el tubo y de ese modo logró cambiar el vector direccional del flujo de partículas no solo por el campo, sino también por un espejo especial capaz de girar, lo que abrió perspectivas completamente nuevas para usar la invención. En 1903, Venelt colocó un electrodo catódico en forma de cilindro dentro del tubo, lo que permitió controlar la intensidad del flujo emitido.
En 1905, Einstein formuló las ecuaciones.calculando el efecto fotoeléctrico y después de 6 años se demostró un dispositivo de trabajo para transmitir imágenes a través de distancias. El haz fue controlado por un campo magnético, y un condensador fue responsable del valor del brillo.
Al comienzo de la producción de los primeros modelos CRT, la industria no estaba preparada para crear pantallas con un gran tamaño diagonal, por lo que se utilizaron lentes de aumento como compromiso.
Dispositivo de tubo de rayos catódicos
Desde entonces, el dispositivo se ha modificado, pero los cambios son de naturaleza evolutiva, ya que no se ha agregado nada fundamentalmente nuevo al trabajo.
La caja de vidrio comienza con un tubo conExtensión cónica formando una pantalla. En los dispositivos de imagen en color, la superficie interna con un cierto paso está cubierta con tres tipos de fósforo (rojo, verde, azul), dando su color de brillo cuando impacta un haz de electrones. En consecuencia, hay tres cátodos (pistolas). Para eliminar los electrones desenfocados y garantizar el impacto exacto del haz deseado en el punto deseado de la pantalla, se coloca una rejilla de acero entre el sistema de cátodo y la capa de fósforo. Se puede comparar con una plantilla que corta todo lo innecesario.
С поверхности подогреваемых катодов начинается emisión de electrones. Se apresuran hacia el ánodo (electrodo, con una carga positiva) conectado a la parte cónica del tubo. Luego, los haces son enfocados por una bobina especial y caen en el campo del sistema de desviación. Al atravesar el enrejado, caen en los puntos necesarios de la pantalla, provocando la conversión de su energía cinética en un resplandor.
Tecnología informática
Monitores de tubo de rayos catódicos encontradosuso generalizado en sistemas informáticos. Simplicidad de diseño, alta confiabilidad, reproducción precisa del color y ausencia de demoras (los mismos milisegundos de la reacción matricial en la pantalla LCD): estas son sus principales ventajas. Recientemente, sin embargo, como ya se indicó, CRT está siendo reemplazado por monitores LCD más económicos y ergonómicos.