La clemátide no dejará indiferente a nadie.Hermosas flores de diversas formas y colores florecen en sus gráciles piernas desde principios de junio hasta el frío. Dependiendo de la variedad, pueden crecer en un arbusto compacto o extenderse con una liana de hasta 10 metros de largo.
Estas plantas trepadoras son de la familia de los ranúnculos.Desde la España sensual, algunos jardineros temen que cuidarse de ellos sea muy difícil. El cultivo tiene sus propias características, las más importantes de las cuales son una buena elección de lugar, la alimentación oportuna de clematis y la poda correcta.
Fertilización en la siembra
El aderezo en el primer año después de la siembra de primavera no se lleva a cabo. En el futuro, la cantidad de nutrientes en el suelo disminuye y la planta necesita fertilizantes.
Aderezo alterno para floración abundante
La primera alimentación de clemátide se lleva a cabo en mayodespués del crecimiento de brotes. El segundo, durante el período de gemación. La alimentación de clemátides en la primavera estimula su crecimiento y desarrollo. En este momento, la planta necesita urgentemente nitrógeno. Para esto, cualquier fertilizante complejo con un alto contenido de nitrógeno es adecuado (marcado en el envase con la letra N). Además, el suelo debajo de la planta se vierte con leche de lima y se cubre con mantillo.Para obtener clemátides fuertes y con abundante floración, el aderezo se debe llevar a cabo durante toda la temporada de crecimiento de la planta, aproximadamente 2 veces al mes.
Durante el verano, los apósitos minerales se alternan conorgánico Para el aderezo mineral, se usa una caja de fósforos de fertilizante complejo en un balde de agua. Para la infusión orgánica de hierbas (1-2 l), excrementos de aves (1:15) o lechada fermentada (1:10).
Desde agosto, no se usan fertilizantes de nitrato, suEl lugar es fósforo. Su falta puede causar hojas marrones, inhibición del crecimiento de raíces y brotes. Si en primavera se usó nitrato de potasio o nitrato de amonio para el aderezo, entonces en la segunda mitad del verano es necesario reemplazarlo con sulfato de potasio. Los brotes deben madurar completamente para que en invierno el jardinero tenga una clemátide fuerte lista para la invernada. La alimentación con fósforo en septiembre se lleva a cabo en el apósito principal en forma de harina de huesos, superfosfato simple o doble. Sin embargo, el exceso de fósforo en el suelo puede causar el envejecimiento prematuro de la planta y provocar la incidencia de clorosis. Para neutralizar la acción de los fosfatos, se introduce sulfato de hierro en el suelo una vez cada 2 semanas.
La clave del éxito es un buen suelo.
En tierras cultivadas bien aireadas, la raízEl sistema clematis se extiende hasta 1 m de ancho desde la base del arbusto y hasta 80 cm de profundidad, lo que permite a la planta seleccionar minerales y oligoelementos que faltan para la vida del suelo.
La clemátide plantada adecuadamente, que se alimenta correcta y completamente, siempre florece y tolera bien el invierno.